Cuando recibí la colaboración de Sebastián Castro, como hace muy seguido, me prendí inmediatamente a leer su trabajo periodístico.

Con Sebastián la mayoría de las veces no estamos de acuerdo en los temas que analizamos.

Para mí es un joven muy inteligente, y me di cuenta que se había enfrentado a alguien que admiro por su trabajo periodístico, Federico Leicht.

Casualmente, hacía pocos días conocí a Leicht personalmente, en una reunión en su casa pedida por la directiva del Movimiento Basta Ya, que tengo el honor de presidir.

Nos contó con mucha firmeza lo que es el “Coordinador Libertario”, justamente a lo que fuimos tres dirigentes del Basta Ya.

Fue muy amable, no solo habló, sino que fue un buen oyente. A las pocas horas el movimiento resolvió no acompañar esta propuesta.

Voté esa resolución que fue unánime.

Personalmente me llevé un excelente concepto de Federico Leicht, tiene mucha personalidad, pelea contra un poder mayúsculo y es valiente.

Algunos de nuestros compañeros nos decían que no le creen que no vaya a aprovechar la movida que lidera para sacar réditos personales políticos futuros.

Él no lo negó, solo dijo que no sabía qué haría cuando lleguen los tiempos electorales, pero que el coordinador nada tiene que ver con la política partidaria.

Sin duda que Leicht es de derecha, que el coordinador es de derecha y que incluye su odio claro hacia la ultra izquierda, hacia los tupamaros, el MPP y la historia mal contada.

Una lucha válida, como todas las luchas.

Confieso que me tienta hacerle una entrevista, pero no es el momento y rescato algunos conceptos de Leicht en las múltiples notas que le han hecho.

En todas se muestra jugado, hasta agresivo, parece que tiene muchas ganas de trascender, y eso tampoco es malo.

“Sí... La izquierda cultural ganó por goleada. La hegemonía cultural de la izquierda en Uruguay es brutal, y no sólo del MLN, toda la izquierda generó un relato...”

Es que hoy ser anti-Frente Amplio es un acto patriótico, lo hago por mis hijos, por sentido común. Si están haciendo mierda todo, ¿qué querés que te diga? Son malandras, ladrones, corruptos. Es un acto militante porque lo que quiero es que se vayan, que dejen de robar y de mentir. Mirá, investigar a los sectores de poder que están en el ejercicio del gobierno es una de las principales labores de un periodista. Igual te digo: no creo que sólo en el FA haya corrupción, no soy tan gil. Pero sistemáticamente desde hace 13 años hay un grupo de gente en el poder, de la izquierda, que... Mirá, te lo digo así: si acá hay justicia, si hay un Poder Judicial independiente, acá hay un montón de gente que va a terminar presa, porque son delincuentes comunes. Y del MPP especialmente, porque es un sector lumpenizado, y que conciben la política en un límite que siempre está al borde de la legalidad, porque tienen esa tradición, es histórica. ¿Hay otros sectores del gobierno que tienen gente corrupta? Claro que sí, pero el MPP es el emblema, o surgen figuras como (Raúl) Sendic, todo ese grupo de gente, que son primos hermanos del MPP, de los tupamaros, que son lo peor. No es una labor militante, es una labor de denuncia sistemática. Y yo sólo cuento con mi cuenta de Facebook, la de Twitter y los libros que publico tras mis investigaciones.”

Le dijo a Cesar Bianchi para Montevideo Portal en una gran entrevista.

Mi amigo Castro, con mucho nivel lo trata de pajero, y además me impactó esto que escribió…

“Y debo ser honesto, en algún caso me he puesto de pie para aplaudir sus intervenciones periodísticas. Pero en cuanto su discurso se convirtió en un monólogo ególatra que sólo busca estar rodeado de una corte de admiradores y aduladores, me convencí de su falta de respeto por la misma libertad que tanto pregona”.

Esto con otras palabras Sebastián también me lo ha dicho a mí y lo pude digerir.

Quedé con la idea que Leich es frontal, valiente y la tiene clara, sabe muy bien hacia dónde va y a dónde quiere llegar.

Su tema hoy es cultural y no es político, pero sabe muy bien que desde afuera no se cambia nada y que desde adentro es posible.

Habla mucho contra medios y colegas, los califica de ser “militantes” de la izquierda, pero quizás sin darse cuenta es también un periodista militante a favor de su ideología de derecha radical, con un odio marcado a la izquierda radical.

Personalmente estoy de acuerdo en el periodismo de periodistas, no son intocables y hay muchos delincuentes disfrazados de periodistas.

En síntesis, yo lo apoyo, lo admire y lo respeto.